LA PALMA – ¡EL LUJO ESTÁ EN LO PEQUEÑO!
La perla de las pequeñas Islas Canarias, La Isla Bonita
LA PALMA es uno de los últimos paraísos vírgenes frente a las costas de África. La isla sigue siendo parte de Europa.
LA PALMA encanta con su vegetación única en Canarias, fascina con impresionantes volcanes y montañas de hasta 2.426 m de altitud, impresiona con sus bosques de laurisilva y su atmósfera mística y sorprende con el Océano Atlántico que invita a nadar todo el año. Pero donde solo tomar el sol en la cálida arena negra volcánica ya es una cura de relajación en sí misma.
LA PALMA, también llamada la isla verde o la isla de la eterna primavera, ofrece unas vacaciones activas con parapente, buceo, senderismo, natación y bicicleta de montaña. ¿O prefieres un ambiente chill-out? En todos los rincones de la isla hay pequeños ‘kioskos’, donde se sirven deliciosos pescados frescos y especialidades canarias. Restaurantes como los encuentras ya casi en ninguna parte de Europa, tienen su lugar permanente justo al lado del mar. Donde podrá relajarse con los pies sobre las cálidas piedras negras y disfrutar de la puesta de sol.
LA PALMA, un idilio con plantaciones de plátanos y aguacates y casas pintorescas con un toque sudamericano. Con la capital, Santa Cruz de la Palma – una cuidad con mucha vida – cuyas casas señoriales de estilo colonial son evidencia de que la ciudad fue una vez uno de los centros comerciales más importantes para los barcos con destino a América. En la plaza del mercado de Santa Cruz y también en la de Los Llanos de Aridane, los pequeños agricultores ofrecen sus productos: piña, aguacates, plátanos, pimientos, papayas, mangos, especias, hierbas, la famosa salsa MOJO, elaborada a base de pimientos rojos y verdes con cilantro. Por no hablar de los vinos de la isla de excelente calidad. Además, hay un sinfín de cafeterías y restaurantes que invitan a disfrutar, por ejemplo en Los Llanos de Aridane en la Plaza de España bajo la sombra de laureles centenarios. En este pueblo del soleado oeste de la isla, también puedes pasear por la zona peatonal entre las antiguas casas canarias que albergan todo tipo de comercios.
LA PALMA, volver a la naturaleza, que aquí sigue intacta y debe seguir siéndolo. Debido al cielo despejado y la oscuridad absoluta, muchos observatorios astronómicos internacionales se han asentado en el Roque de los Muchachos (2426 mtr). Para mantener el cielo lo más despejado posible, se aprobó una ley que prohíbe los letreros de neón y requiere que las luces exteriores emitan solo luz amarilla hacia abajo. Toda la isla es Reserva de la Biosfera de la UNESCO desde 2002 debido al cráter de erosión más grande del mundo, la Caldera de Taburiente, cuyas estribos se fusionan en una cadena montañosa de unos 160 volcanes. Se puede descubrir la belleza de la isla, que (afortunadamente) se ha salvado en gran medida del turismo de masas debido a la falta de las clásicas playas de arena blanca, a lo largo de senderos bordeados de helechos, palmeras, dragos, higueras y almendros, así como todo tipo de suculentas, muchas de las cuales son endémicas. A través de barrancos, cascadas y picos de montañas. El atractivo de LA PALMA radica en su versatilidad. El norte montañoso y húmedo (como un jardín tropical), el sur seco y volcánico con las salinas, y calas escondidas. Además, el clima templado, primaveral durante todo el año, también ha dado a Canarias el nombre de «las islas de la felicidad» desde su descubrimiento. ¡Lo cual se aplica absolutamente a LA PALMA! Toda esta descripción también podría aplicarse a una isla del Caribe, pero estamos hablando de LA PALMA, ‘La Isla Verde’ o ‘La Isla Bonita’, a solo 3 horas de vuelo desde la península de España.
¿Se volvió curioso?
¡Nos encantaría que pasaras tus próximas vacaciones en Puro Atlántico en LA PALMA!